SAN JORGE DE CAMBOULAS
De la aldea floreciente de mitades del siglo XVIII, solo se conserva en San Jorge la iglesia, la antigua casa del cura y una residencia secundaria.
Este paraje rocoso, a mitad de la ladera del valle del Viaur, debió ser un sitio propicio para los cultos antiguos recuperados por el cristianismo que ha construido una iglesia y adaptado las leyendas.
En efecto, de aquí surge una leyenda cristianizada: perseguido por sus enemigos (Sarracenos), San Jorge (aquí hay una confusión entre San Jorge el caballero y San Jorge de Rodés, el obispo de Lodeva) habría cruzado de un salto el valle desde la granja de la Roqueta, cayendo su caballo en la roca debajo la iglesia en la que se pueden ver las cuatros huellas de los cascos.
La leyenda del salto se encuentra en muchos sitios y es una variante de la zancada del gigante Gargantua.
El Viaur fue, como muchos otros ríos, una divinidad y era en otros tiempos una frontera natural.
La iglesia gótica dependía de San Víctor de Marsella. Construida en 1060 se puede ver que fue retocada más tarde para servir de granero (ajimez en estilo Renacentista) Como todos los antiguos cementerios el de san Jorge junta la igleisa. Se puede ver un sarcófago cavado en la peña en el lado del camino al norte de la igleisa.
El Cristo en majestad que adorna el dintel de la puerta, proviene de la antigua catedral románica de Rodés que fue derruída la noche del 16 al 17 de febrero de 1276; el monje obrero a cargo de la reconstrucción fue San Jorge. Éste hizo de modelo del Cristo que adorna el tímpano de Conquas.
El puente peatonal de San Jorge fue construido el año 1872 con la piedra extraída del sitio. El camino de piedra que sube hasta la iglesia servía a los feligreses que volvían de los oficios y entierros.